La Guardia Nacional asumió la función de autoridad de supervisión de medidas cautelares y de la suspensión condicional del proceso. Esta institución, conformada por militares, ahora estaría habilitada, por ejemplo, a entrevistar periódicamente a víctimas o testigos de delitos para dar seguimiento al cumplimiento de las medidas cautelares impuestas y realizar visitas no anunciadas al lugar en el que se encuentre el imputado, de acuerdo con el artículo 77 de la Constitución.