Una investigación periodística del periódico El Faro reveló la total ausencia de mecanismos de consulta y de diálogo social para formular la Ley Bitcoin, que convirtió a la criptomoneda legal en El Salvador. La Ley Bitcoin fue acordada por los hermanos del presidente en reuniones secretas con promotores de las criptomonedas. Ellos no ostentan cargo oficial en el gobierno.