Una investigación del periódico El Faro revela cómo el gobierno salvadoreño realiza negociaciones con las tres principales pandillas de El Salvador. La finalidad es conseguir que el número de asesinatos mantenga su “histórico desplome”. Las negociaciones se habrían llevado a cabo durante 2020, en plena pandemia, dentro de penales de máxima seguridad con las tres organizaciones consideradas “terroristas” por la legislación salvadoreña: Mara salvatrucha-13, Barrio 18 Revolucionarios y Barrio 18 Sureños.